martes, 16 de octubre de 2012

FRUTAS DE OTOÑO


FRUTA OTOÑAL


Septiembre viene a ser una transición entre verano y otoño. Las verduras siguen siendo predominantemente las que teníamos en agosto. Debemos aprovecharnos de los últimos melocotones. Hacia finales de septiembre ya es posible encontrar los cultivos de la nueva estación. Los cítricos existentes (naranja…) proceden de la importación.
Es época de brevas e higos (delicados y deliciosos), uvas (que nos acompañarán hasta fin de año), algunas frutas del bosque (llenas de vitaminas y tan refrescantes como las grosellas, los arándanos o las moras), granadas, caquis, manzanas y peras (variedades típicamente otoñales).higos y brevas,Voluptuosos y muy dulces, los frutos de la higuera empiezan a cargar los árboles a finales de agosto, finalizando la temporada a primeros de octubre. Al ser tan breve su período de maduración, hay que darse prisa para disfrutar de todo su sabor. Ricos en hidratos de carbono y fibra, destacan también por su alto contenido en minerales y vitamina A. Se suelen saborear frescos en temporada, aunque secos son uno de los postres típicos de las Navidades.
La vid es una planta leñosa que trepa gracias a unos zarcillos (ramas modificadas) y puede llegar a medir 17 metros o más si no recibe cuidados. Las flores pequeñas y verdosas, ordenadas en racimos, preceden al fruto, de color casi negro, verde, rojo o ámbar.
Botánicamente, el fruto es una baya, más o menos globular y en cuya pulpa jugosa se encuentran las semillas. La uva posee unas 60 especies procedentes de la parte templada del hemisferio norte, con variedades de mesa, desecadas para producir pasas o prensadas para elaborar mosto o vino.
El caqui es una fruta tropical de origen chino, caracterizada por un sabor áspero, ocasionado por su alto contenido en taninos, que va desapareciendo a medida que va madurando.
En la actualidad hay variedades que son suaves al comer, y son de una textura parecida la melocotón y la manzana, como el persimon y el sharoni .
El caqui es una fruta rica en azúcares, sales minerales y vitaminas. Es diurética y descongestiona el hígado. Gracias a su contenido en provitamina A es ideal para la belleza de nuestra piel y puede incluso mantener el “morenito” veraniego por más tiempo. Además, debido a su contenido en fibra, favorece la actividad intestinal y ayuda a combatir la diarrea.
De Frutas
Otra de las frutas de la temporada de otoño es la granada. Originaria del Oriente Próximo y del interior de Asia Menor, posee una cáscara gruesa en cuyo interior encontramos unos granos de pulpa jugosa de color rojo intenso. Es rica en vitaminas A, B y C, así como de potasio, fósforo, cloro, magnesio, calcio y sodio.
La granada es un alimento digestivo, diurético, astringente y depurativo que contribuye a limpiar nuestro organismo. Además, también ayuda a combatir el colesterol, el cáncer de colon, las lombrices intestinales y la arteriosclerosis. Sus aplicaciones van más allá de las gastronómicas y terapéuticas, ya que su zumo natural es empleado a modo de cosmético natural para dar frescura a la piel del rostro.
El zumo de la granada tiene muchas utilidades y una de estas es la de proteger la garganta de los repentinos cambios de temperatura en otoño. Haz gárgaras por la noche con el zumo, antes de irte a dormir, y notarás cómo suaviza la garganta y aleja las infecciones que puede provocar un simple catarro.
La manzana es el fruto de unos pequeños árboles, originarios de Europa. Estos árboles pertenecen a la familia de las Rosáceas. Según la variedad, las manzanas pueden ser redondeadas, alargadas o achatadas y pueden variar de color desde el rojo brillante hasta el verde y la pulpa puede variar de blanca a rosa. Las manzanas también varían en sabor, desde muy ácidas a muy dulces, y la textura puede ser crujiente, jugosa o suave. La época de cosecha abarca la primavera, finales de verano y principios de otoño, pero las manzanas están disponibles en el mercado durante todo el año, debido a sus excelentes condiciones de conservación.
La pera pertenece a la familia de las Rosáceas. Dependiendo de la variedad, las peras pueden variar en tamaño, forma y color.
Las peras son una buena fuente de vitamina C, fibra, potasio y vitamina E. La fibra ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre y el colesterol. Una pera de tamaño medio contiene un 10% de la vitamina C y un 15% de la fibra que nuestros cuerpos necesitan diariamente para mantenerse sanos.