lunes, 10 de abril de 2023

AULAS DE LA 3@ EDAD DE DÉNIA

 

Oficina del Mayor



La oficina del Mayor, adjunta todos los servicios y prestaciones socioculturales que se ofrecen a la Tercera Edad desde el  Centro Social.

SERVICIOS:

  • Teatro Auditorio de 432 localidades.
  • Centro social para mayores:
    • Cafetería
    • Sala de Ocio-Tv
    • Peluquería 3ª Edad
    • Higienista del pie
    • Hogar del jubilado
    • Talleres y actividades Aulas 3ª Edad

Horari

  • Matins de dilluns a dijous de 9 a 13 h. y de 16:30 a 19:30 h.
  • Divendres de 9 a 13 h.

Aulas de la Tercera Edad

Las Aulas de la tercera Edad son un lugar de encuentro, de diálogo, de convivencia y de participación, donde las personas mayores aumentan su autoestima, mejoran su equilibrio y armonía, consiguiendo seguir activas y comprometidas con la dinámica social y cultural.

En las Aulas de la Tercera Edad de Dénia, se centra la formación integral de las personas mayores a través de actividades comprendidas en tres áreas:

  • Área de Humanidades donde figuran los talleres de Historia del arte, Informática, Inglés,  Técnicas de teatro y Técnicas de memoria.
  • Área plástica y creativa, donde se incluyen los talleres de Pintura, Bolillos, Habilidades creativas, Cerámica y Vidriera (técnica tiffany).
  • Área de actividades físicas, que engloba, Yoga, Espalda Sana, Pilates, Sevillanas, Gimnasia mantenimiento, Taichi-Chikung-Chen y Baile.

Actividades aulas:

Las actividades duran un curso escolar, generalmente de octubre a junio. Durante el curso se realizan salidas y excursiones, conferencias, cursillos,  seminarios y a final de curso se realiza un festival cultural, donde todos los alumnos participan y nos ofrecen una muestra de lo aprendido durante el curso. También se inaugura una exposición final de los trabajos creativos.

El carácter no reglado, de las actividades que conforman este plan de estudios, permite que cada persona opte por aquellas materias que más les satisfacen.
Estas materias llevan como intención, proporcionar una ocupación relajada y productiva durante el tiempo de ocio, de las personas que participen en la Aulas.

La matriculación se realiza durante el verano. Una vez acabado el curso se indican las fechas de matriculación. Cada alumno puede matricularse en dos talleres.  Una vez comenzado el curso y en función de las plazas sobrantes, pueden tener la posibilidad de matricularse en un 3er taller, La forma de pago puede ser trimestral o anual.

Espacios donde se imparten talleres:

Centro Social, Centro de Barrio Oeste, espacios parque Torrequemada.

LA MONA DE PASCUA DE ALCOY

 LA MONA DE PASCUA DE ALCOY




En España existen multitud de tipos de mona, cada lugar tiene su propia tradición y hoy me gustaría enseñaros la tradición Alcoyana de su mona de pascua.

La mona consiste en un bollo dulce decorado con un huevo cocido en el centro. La forma tradicional es un bollo redondo pero en la actualizad podemos encontrarlas con formas de animales.

El origen de porqué se regalan huevos en pascua no está muy claro, pero la teoría más extendida dice que durante los siglos XI y XVIII, la iglesia prohibió comer huevos durante la cuaresma ya que se consideraban carne. Por lo tanto la gente los cocía para conservarlos y cuando al fin terminaba la cuaresma lo celebraban decorando los huevos y regalándolos.

Receta para la Mona de pascua

Mona de pascua tradicional de Alcoi.

Ingredients

  • Zumo de 2 mandarinas
  • 16 gr de levadura seca
  • 2 huevos
  • 100 gr de agua
  • 50 gr de aceite de girasol
  • Ralladura de 1 limón
  • 200 gr de azúcar
  • 500 gr de harina de fuerza + 100 gr para ajustar
  • 3 huevos cocidos
  • 1 huevo para pintar
  • Azúcar para decorar

Instructiones

  1. Exprimimos las 2 mandarinas y diluimos la levadura en el zumo. Seguidamente vamos añadiendo los huevos, el agua y el aceite y mezclamos.
  2. Incorporamos la ralladura de limón y el azúcar y mezclamos bien. Por ultimo añadimos los 500 gr de harina y si la masa nos queda muy pegajosa vamos añadiendo cucharadas de harina hasta que podamos formar una bola con la masa. Yo necesité 60 gr más, todo dependerá del zumo que tengan nuestras mandarinas.
  3. Cubrimos el bol con un papel film y lo dejamos reposar toda noche, mínimo 12 horas en la nevera.

  4. Por la mañana dividimos la masa en 4 trozos (si queremos hacer 3 monas pequeñas), 3 trozos grandes y uno pequeño para hacer los churritos o las extremidades de la tortuga si nos decidimos por este tipo de mona.
  5. Con los 3 trozos grandes hacemos unas bolas y las colocamos en una bandeja del horno forrada con papel de horno.
  6. Aplanamos un poco el centro de la bola y le ponemos un huevo cocido que taparemos con 2 churros de masa.
  7. Precalentamos el horno a 50ºC y metemos nuestras monas en el horno apagados y los dejamos dentro 1 hora.
  8. Sacamos las monas del horno, lo precalentamos a 170ºC y vamos batiendo un huevo para pintarlas.

  9. Las monas crecerán un poco más al hornearlas así que os recomiendo que la tercera la hagáis en otra bandeja.



PAPA FRANCISCO


                                            PAPA FRANCISCO

El primer Papa americano es el jesuita argentino Jorge Mario Bergoglio, de 76 años, arzobispo de Buenos Aires. Es una figura destacada de todo el continente y un pastor sencillo y muy querido en su diócesis, que ha visitado a lo ancho y a lo largo, incluso trasladándose en medios de transporte público, en los quince años de ministerio episcopal.

«Mi gente es pobre y yo soy uno de ellos», ha dicho más de una vez para explicar la opción de vivir en un apartamento y de prepararse la cena él mismo. A sus sacerdotes siempre les ha recomendado misericordia, valentía apostólica y puertas abiertas a todos. Lo peor que puede suceder en la Iglesia, explicó en algunas circunstancias, «es aquello que De Lubac llama mundanidad espiritual», que significa «ponerse a sí mismo en el centro». Y cuando cita la justicia social, invita en primer lugar a volver a tomar el catecismo, a redescubrir los diez mandamientos y las bienaventuranzas. Su proyecto es sencillo: si se sigue a Cristo, se comprende que «pisotear la dignidad de una persona es pecado grave».

Su biografía oficial es de pocas líneas, al menos hasta el nombramiento como arzobispo de Buenos Aires. Llegó a ser un punto de referencia por sus fuertes tomas de posición durante la dramática crisis económica que devastó el país en 2001.

En la capital argentina nació el 17 de diciembre de 1936, hijo de emigrantes piamonteses: su padre, Mario, era contador, empleado en ferrocarril, mientras que su madre, Regina Sivori, se ocupaba de la casa y de la educación de los cinco hijos.

Se diplomó como técnico químico, y eligió luego el camino del sacerdocio entrando en el seminario diocesano de Villa Devoto. El 11 de marzo de 1958 pasó al noviciado de la Compañía de Jesús. Completó los estudios de humanidades en Chile y en 1963, al regresar a Argentina, se licenció en filosofía en el Colegio San José, de San Miguel. Entre 1964 y 1965 fue profesor de literatura y psicología en el Colegio de la Inmaculada de Santa Fe y en 1966 enseñó las mismas materias en el Colegio del Salvador en Buenos Aires. De 1967 a 1970 estudió teología en el Colegio San José, y obtuvo la licenciatura.

El 13 de diciembre de 1969 recibió la ordenación sacerdotal de manos del arzobispo Ramón José Castellano. Prosiguió la preparación en la Compañía de 1970 a 1971 en Alcalá de Henares (España), y el 22 de abril de 1973 emitió la profesión perpetua. De nuevo en Argentina, fue maestro de novicios en Villa Barilari en San Miguel, profesor en la facultad de teología, consultor de la provincia de la Compañía de Jesús y también rector del Colegio.

El 31 de julio de 1973 fue elegido provincial de los jesuitas de Argentina, tarea que desempeñó durante seis años. Después reanudó el trabajo en el campo universitario y entre 1980 y 1986 es de nuevo rector del colegio de San José, además de párroco en San Miguel. En marzo de 1986 se traslada a Alemania para ultimar la tesis doctoral; posteriormente los superiores le envían al colegio del Salvador en Buenos Aires y después a la iglesia de la Compañía de la ciudad de Córdoba, como director espiritual y confesor.

Es el cardenal Antonio Quarracino quien le llama como su estrecho colaborador en Buenos Aires. Así, el 20 de mayo de 1992 Juan Pablo ii le nombra obispo titular de Auca y auxiliar de Buenos Aires. El 27 de junio recibe en la catedral la ordenación episcopal de manos del purpurado. Como lema elige Miserando atque eligendo y en el escudo incluye el cristograma ihs, símbolo de la Compañía de Jesús.

Concede su primera entrevista como obispo a un pequeño periódico parroquial, «Estrellita de Belén». Es nombrado enseguida vicario episcopal de la zona de Flores y el 21 de diciembre de 1993 se le encomienda también la tarea de vicario general de la arquidiócesis. Por lo tanto no sorprendió que el 3 de junio de 1997 fuera promovido como arzobispo coadjutor de Buenos Aires. Antes de nueve meses, a la muerte del cardenal Quarracino, le sucede, el 28 de febrero de 1998, como arzobispo, primado de Argentina. El 6 de noviembre sucesivo fue nombrado Ordinario para los fieles de rito oriental residentes en el país y desprovistos de Ordinario del propio rito.

Tres años después, en el Consistorio del 21 de febrero de 2001, Juan Pablo ii le crea cardenal, asignándole el título de san Roberto Bellarmino. En esa ocasión, invita a los fieles a no acudir a Roma para celebrar la púrpura y a destinar a los pobres el importe del viaje. Gran canciller de la Universidad Católica Argentina, es autor de los libros Meditaciones para religiosos (1982), Reflexiones sobre la vida apostólica (1986) y Reflexiones de esperanza (1992).

En octubre de 2001 es nombrado relator general adjunto para la décima asamblea general ordinaria del Sínodo de los obispos, dedicada al ministerio episcopal, encargo recibido en el último momento en sustitución del cardenal Edward Michael Egan, arzobispo de Nueva York, de presencia necesaria en su país a causa de los ataques terroristas del 11 de septiembre. En el Sínodo subraya en particular la «misión profética del obispo», su «ser profeta de justicia», su deber de «predicar incesantemente» la doctrina social de la Iglesia, pero también de «expresar un juicio auténtico en materia de fe y de moral».

Mientras, en América Latina su figura se hace cada vez más popular. A pesar de ello, no pierde la sobriedad de trato y el estilo de vida riguroso, por alguno definido casi «ascético». Con este espíritu en 2002 declina el nombramiento como presidente de la Conferencia episcopal argentina, pero tres años después es elegido y más tarde reconfirmado por otro trienio en 2008. Entre tanto, en abril de 2005, participa en el cónclave en el que es elegido Benedicto xvi.

Como arzobispo de Buenos Aires —diócesis de más de tres millones de habitantes— piensa en un proyecto misionero centrado en la comunión y en la evangelización. Cuatro los objetivos principales: comunidades abiertas y fraternas; protagonismo de un laicado consciente; evangelización dirigida a cada habitante de la ciudad; asistencia a los pobres y a los enfermos. Apunta a reevangelizar Buenos Aires «teniendo en cuenta a quien allí vive, cómo está hecha, su historia». Invita a sacerdotes y laicos a trabajar juntos. En septiembre de 2009 lanza a nivel nacional la campaña de solidaridad por el bicentenario de la independencia del país: doscientas obras de caridad para llevar a cabo hasta 2016. Y, en clave continental, alimenta fuertes esperanzas en la estela del mensaje de la Conferencia de Aparecida de 2007, que define «la Evangelii nuntiandi de América Latina».

Hasta el inicio de la sede vacante era miembro de las Congregaciones para el culto divino y la disciplina de los sacramentos, para el clero, para los institutos de vida consagrada y las sociedades de vida apostólica; del Consejo pontificio para la familia y de la Comisión pontificia para América Latina.